Método de evaluación ARCAS
La llegada de fondos europeos ha reactivado muchos sectores de la economía y, puesto que la Unión Europea ha querido priorizar las inversiones en proyectos sostenibles, hoy os traemos un ejemplo: el proyecto ARCAS. El foco de esta iniciativa está en las rehabilitaciones, con especial atención en la eficiencia energética y salubridad, pero siempre desde la perspectiva del interés social. Las energías renovables, la salud ambiental, el control de emisiones y la accesibilidad son las líneas maestras de este novedoso método.
Financiación y beneficiarios
La financiación del proyecto ARCAS proviene de los fondos SUDOE (Programa de Cooperación Territorial del Espacio Sudoeste Europeo), cuyo ámbito de actuación son las regiones españolas, francesas, portuguesas y británicas (Gibraltar) para contribuir al crecimiento y al desarrollo sostenible. Tal y como se explica en la página de los fondos europeos SUDOE, su misión consiste en la inversión de “proyectos de cooperación transnacional en materia de innovación, medioambiente, nuevas tecnologías de la información y desarrollo urbano sostenible. Trabajando conjuntamente, estos actores regionales contribuyen a que el Sudoeste europeo alcance las estrategias de la Unión europea en materia de crecimiento, empleo y desarrollo sostenible”.
Concretamente, los fondos SUDOE han subvencionado el proyecto ARCAS con 1.316.911,38 euros, cuyo principal beneficiario es la Fundación Estudios Calidad Edificación Asturias (FECEA); pero también colaboran otras organizaciones como diferentes universidades españolas (entre otras, la Universidad del País Vasco) e internacionales (como la portuguesa Minho o la francesa La Rochelle), así como instituciones públicas.
El proyecto
La iniciativa comenzó su puesta en marcha en octubre de 2019, con el objetivo de terminar en un periodo no superior a 43 meses; es decir, en marzo de 2023. El ámbito de actuación del proyecto ARCAS se escogió por las similitudes climáticas que tienen esos territorios. “Para ello, se elaboró el Mapa climático del Arco Atlántico Sur de Europa, que muestra los datos históricos y simulaciones del microclima futuro alrededor de los edificios para ser tenidos en cuenta en la Herramienta ARCAS: desde el norte de Portugal hasta la Rochelle en Francia, pasando por todas las comunidades autónomas del norte de España donde habitan aproximadamente 17.000.000 ciudadanos europeos”, explica Emilio Suárez, encargado del Proyecto ARCAS.
El principal motor de búsqueda para este método es la ciencia y la innovación, tanto en el campo social como el tecnológico, de forma que la eficiencia energética sea una prioridad, pero siempre complementándose con criterios como el confort, el ahorro y los suministros provenientes de fuentes limpias.
La metodología
Todo el proyecto ARCAS se encamina hacia la erradicación de la pobreza y la reducción de las disparidades en la forma de vida en el territorio SUDOE, así como a promover un sistema abierto que lleve al crecimiento económico y al desarrollo sostenible con una mejor comprensión científica de los problemas comunes desde la perspectiva de la sostenibilidad y la eficiencia energética.
El propósito final es conseguir crear una herramienta integral cuyos pasos vienen marcados por lo que el proyecto denomina GT4, que es el grupo de tareas que investiga sobre la influencia de la pobreza energética en la rehabilitación de edificios en el seno del proyecto de investigación ARCAS, con el objetivo de desarrollar una metodología de evaluación y certificación orientada a la integración óptima de tres ejes:
EJE 1 – Autonomía – Eficiencia energética.
EJE 2 – Calidad del aire – Bienestar.
EJE 3 – Calidad social – Pobreza energética.
La cooperación internacional es una de las herramientas más poderosas del mundo globalizado en el que vivimos. Poder utilizarla para crear una metodología que evalúe, bajo criterios energéticos y sociales, el parque residencial europeo y sus potenciales rehabilitaciones siempre debe ser una buena noticia.