Micheel Wassouf: “Si conciliamos el pasado con nuestro presente, podemos conseguir nuevas fórmulas muy eficientes para resolver los retos actuales de la sociedad”

La semana pasada tuvimos la suerte de poder entrevistar a Micheel Wassouf, el socio fundador de la asociación oficial Española Passivhaus (PEP‐Plataforma Edificación Passivhaus). Micheel Wassouf es también, junto con  Anheloka Rutzmoser, socio fundador de Energiehaus. Se trata del estudio de Arquitectura pionero en el diseño y la certificación de edificios de muy bajo consumo energético.

Y, además, Micheel fue el primer Certificador Passivhaus en España, acreditado por el  Passivhaus Institut  para certificar edificios con el estándar Passivhaus y rehabilitaciones EnerPHit.

Entrevista:

Si le tuviese que explicar a alguien ajeno al mundo de la arquitectura qué es una casa pasiva, ¿cómo lo haría?

Una casa pasiva tiene la energía solar como fuente principal para acondicionar los espacios interiores y garantizar a la vez un muy alto confort térmico y de salud. En el clima del Mediterráneo, dispone de una muy buena protección solar y de estrategias pasivas de enfriamiento, para reducir el consumo energético del edificio.

¿Cómo nació EnergieHaus?

EnergieHaus nació en el 2008 con el fin de desarrollar una arquitectura pasiva. Para ello, combinamos el legado de arquitectura del Mediterráneo con soluciones de tecnología avanzada de la construcción. Si conciliamos el pasado con nuestro presente, podemos conseguir nuevas formulas muy eficientes para resolver los retos actuales de la sociedad.

Sabemos que los requisitos para optar a una certificación passivhaus son muy exigentes, ¿son muchos los proyectos que lo consiguen?

Hemos certificado a día de hoy 14 edificios Passivhaus. Viendo el total de edificios que se están construyendo o rehabilitando, se trata de un número muy reducido. Sin embargo,el interés del sector de construcción es cada vez más creciente. Sobre todo, con la llegada del 31 de diciembre del 2018, cuando los edificios de energía casi nula van a ser obligatorios en España. Passivhaus se considera como equivalente a estos edificios llamados nZEB. Cada vez hay más promotores y constructores interesados en este estándar. Por eso, estamos preparando con nuestros cursos de formación a los técnicos para que haya una oferta adecuadamente cualificada.

En cuanto a coste económico y proceso constructivo, ¿qué supone apostar por un proyecto de casa pasiva?

Es cierto que comparando con el mismo edificio que cumple estrictamente con el Código Técnico de la Construcción, una Passivhaus tiene un ligero sobrecoste. Esta inversión inicial adicional se suele recuperar en un periodo de pocos años. Con lo cual, la Casa Pasiva, si miramos el coste de ciclo de vida, es una inversión económica muy interesante.

¿Cuáles son los beneficios, tanto para los individuos como para el entorno, de una casa pasiva?

Además del beneficio económico, este estándar asegura un muy alto confort térmico y de salud, difícil de cuantificar en números directos. Existen estudios de sociólogos en Inglaterra donde se ha verificado que una aplicación  a escala amplia de edificios pasivos puede reducir sensiblemente la pobreza energética que lastra sobre las sociedades. Reducción que trae consigo un ahorro en gasto público para la sanidad pública. En escuelas, la aplicación del estándar puede además mejorar el rendimiento de los alumnos, visto la muy alta calidad del aire interior. Por eso estamos intentando convencer a la administración pública para aplicar criterios pasivos en la rehabilitación del parque de edificios de enseñanza. Parque que actualmente se caracteriza por un estándar energético muy pobre.

Estudio de Energiehaus Arquitectos

¿Cree que las empresas de materiales de construcción están apostando por soluciones más sostenibles? ¿Cómo es la perspectiva de futuro en este sentido?

Desde nuestra perspectiva de arquitectos y certificadores, las empresas de materiales de construcción en España son los primeros actores en entender la importancia en apostar por soluciones de calidad. Los últimos 5 años han aparecido cada vez más empresas que ofrecen componentes para la construcción pasiva. Eso facilita enormemente la aplicación del estándar en España.

Si tuviera que poner un país como referente en el ámbito de la construcción sostenible, ¿Cuál sería?

Suiza, Alemania y Austria son seguramente países referentes en la construcción sostenible. Son países donde la consciencia ecologista se ha desarrollado de modo sistemático y horizontal en el conjunto de la sociedad. Y esto se ha sucedido desde los años 80 del siglo pasado. Eso se refleja entre otro en una amplia oferta de productos de construcción para edificios pasivos.

Y, para terminar, ¿Cómo ve el escenario de la arquitectura sostenible en España?

Creo que tiene un camino muy interesante en España. Falta que la propia sociedad crea la demanda necesaria. Eso es un proceso lento, que debe ser empujado, sobre todo, por los políticos en este país.