La estrategia de economía circular del País Vasco pone el foco en la gestión de residuos
El Gobierno Vasco ha aprobado su “Estrategia de Economía Circular” que, con la mirada puesta en el 2030, tiene la misión de impulsar la transición de Euskadi hacia un modelo de economía circular. Así, se prevé la reducción de un 26% de las emisiones de carbono asociadas al consumo en los próximos 10 años, ejerciendo, por lo tanto, un impacto directo en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
Esta disminución de emisiones vendrá motivada por dos factores. En primer lugar, por los cambios en la gestión de residuos. Esto es: la reducción en la generación de deshechos y la apuesta por su reutilización, reincorporándolos a la economía como materiales secundarios. Y, en segundo lugar, por la disminución de la importación de recursos.
Objetivos de la estrategoa
En la estrategia se recogen tres grandes objetivos. El primero es aumentar un 30% la productividad material, indicador que permite medir la evolución de la economía hacia un modelo de producción y consumo menos dependiente de los materiales. Es decir, una productividad material alta es sinónimo de un aprovechamiento más eficiente de los recursos
El segundo objetivo de la Estrategia de Economía Circular del País Vasco es aumentar un 30% la tasa de uso de materiales circulares, disminuyendo la dependencia de las importaciones o la extracción de materias primas. Y, al mismo tiempo, reduciendo la cantidad de residuos que, de otra forma, acabarían depositados en un vertedero.
Y el último de los tres grandes objetivos de esta estrategia es reducir un 30% la tasa de generación de residuos por unidad de PIB.
Además, se incluyen otros dos objetivos como la reducción a la mitad de desperdicios alimentarios, y conseguir que el 100% de los envases de plástico sean reciclables.
Ecodiseño
La gestión de residuos y materias primas secundarias de la construcción es una de las 10 líneas de actuación que corresponden a 4 ámbitos de actuación diferentes, recogidas en la estrategia. Otra de las líneas de actuación es el ecodiseño de productos y edificios.
La Estrategia se centra en el desarrollo continuo de la metodología del ecodiseño y su adaptación para poder aplicar los nuevos estándares ambientales a los productos durante toda su vida útil, en los sectores de la industria, construcción y agroalimentario.
Y es que esta línea plantea el refuerzo de una construcción más sostenible desde el diseño, la utilización de materiales renovables o secundarios, y los procesos más eficientes a través de su industrialización. Pero no solo eso. La estrategia incluye también que, además del diseño, el sector de la construcción deberá apostar por viviendas y oficinas modulares, duraderas, sostenibles y construidas con materiales más sostenibles.
La Estrategia de Economía Circular del País Vasco aborda el reto medioambiental desde una óptica muy global, pero poniendo el foco en el sector de la construcción. Algo que, sin duda, le permitirá avanzar hacia un modelo de economía más sostenible y que, además, mitigará los efectos del cambio climático.