Minicasas rodantes que ofrecen la posibilidad de cambiar de paisaje
Si ya hablamos en diferentes ocasiones de la sostenibilidad y de los diferentes beneficios que podíamos encontrar en las minicasas, hoy os traemos uno más: podemos añadirle la característica de que sean rodantes. Este concepto de casa se ha ido introduciendo poco a poco en Europa, sobre todo en países del norte como Suiza.
Las minicasas rodantes van más allá de una simple caravana. En este caso, es, literalmente, una cabaña trasladable de un lugar a otro. Gracias a que están concebidas a modo de remolque, podemos disfrutar de diferentes paisajes según nos apetezca, o según lo pida nuestro trabajo.
Compromiso con el medioambiente
Si bien es cierto que el respecto al entorno es una característica común de cualquier minicasa, también forma parte del concepto de estas casas tan particulares. Por lo habitual, suelen estar fabricadas con materiales sostenibles y su consumo energético es muy inferior al de una vivienda normal. Pero, no sólo se comprometen con el medio ambiente, sino que, como hemos visto, también gozan de los criterios fundamentales de las casas pasivas.
Tendencia en auge
Esta tendencia arquitectónica, también denominada en inglés ‘Tiny House’, está calando sobre todo en la gente joven. La filosofía de vida de las nuevas generaciones cada vez se centra más en respetar el entorno, vivir con lo necesario y de manera sostenible. Además, los cambios de trabajo son cada vez mayores y su estabilidad laboral se complica por las crisis en las que se ven envueltos. Con las mini casas encuentran una manera de solucionar varios de sus problemas y adaptarse así a las circunstancias actuales que se exigen tanto ellos mismos, como el entorno en el que se desenvuelven. Y es que, la idea de estas casas es demostrar que no son necesarios grandes espacios para disfrutar de una vida plena y cómoda
Ala Köl, una de las últimas creaciones de este concepto
Ejemplo de ello es la minicasa con el nombre Ala Köl, diseñada por la compañía francesa Baluchon, especializada en la construcción de minicasas personalizadas al gusto de cada usuario. Esta minicasa rodante cuenta con su diseño elegante y a la vez acogedor, con unas medidas que se adaptan perfectamente a los habitantes. Además, los toques rústicos de madera hacen que la sensación sea la de estar viviendo en una cabaña.
Esta minicasa, concebida principalmente para dos personas, se encuentra instalada sobre un remolque y, nada más entrar, nos encontramos con el salón. Justo al lado está la cocina y el baño, separado por una puerta corredera. El piso de arriba cuenta con el dormitorio, por lo que tenemos todo lo necesario para disfrutar de momentos en casa y generar recuerdos en estas cuatro paredes.
Lo mejor de este diseño arquitectónico es, quizás, disfrutar de los amplios ventanales que tiene por todas partes y de la luminosidad que proporcionan. Además, está pensando para que puedan incorporarse paneles solares para ser autosuficientes y, tanto el suelo como las paredes disponen de aislamiento térmico natural de algodón, lino y cáñamo.
En definitiva, se trata de una opción asequible y sostenible y que, además, nos permite movernos según cuales sean nuestras circunstancias personales o laborales. Si bien las minicasas ya suponen una respuesta clara a las demandas actuales, la opción de que sean rodantes va un paso más. Y es que, en estos tiempos de teletrabajo, ofrecen la posibilidad de adaptar un hogar a diferentes entornos.
Una vez más, la combinación del cuidado del medioambiente con el cuidado de nuestras necesidades hace que, cada vez más, tengamos opciones disponibles para elegir la que mejor se adapta a nosotros pensando también en el cuidado del planeta.