Elegir materiales de construcción sostenibles: 5 claves a tener en cuenta
Históricamente, los sectores de la arquitectura y de la construcción han empleado una gran cantidad de materiales con altos costes medioambientales, y como ya sabréis, uno de los temas principales de nuestro blog es el de materiales de construcción sostenibles. No en vano, disponemos de una sección específica a este propósito.
Por eso, para contribuir a un mundo más respetuoso con el medioambiente desde el propio sector, creemos es de vital importancia tener en cuenta este tipo de materiales desde la concepción de los proyectos. De hecho, la Política de Productos Integrada de la Unión Europea en el 2001, que trataba de reforzar y reorientar la política medioambiental relativa a los productos, planteaba la necesidad de “establecer un nuevo paradigma del crecimiento y una mayor calidad de vida mediante la creación de riqueza y competitividad sobre la base de productos más ecológicos”. Además, incorporaba que “los productos del futuro consumen menos recursos, tienen menos efectos y riesgos para el medio ambiente y evitan la generación de residuos desde que se conciben”.
Ejemplo de los mismos pueden ser, como ya comentamos en otras ocasiones, la piedra natural, la pizarra natural o la madera, entre otros. Recordemos que se consideran materiales sostenibles aquellos que sean duraderos y que necesiten un escaso mantenimiento, que puedan reutilizarse, reciclarse o recuperarse.
Pero, ¿cómo escoger el tipo de materiales que vamos a utilizar? Algunos de los factores que debemos tener en cuenta a la hora de tomar esta decisión son los siguientes:
- Consumo de energía. La cantidad de energía que consume un determinado producto es clave. La utilización de materiales de bajo consumo energético durante todo su ciclo vital es uno de los mejores indicadores de sostenibilidad. En este sentido, es conveniente prescindir de los plásticos y los metales. Estos consumen una gran cantidad de energía en el proceso de fabricación.
- Impacto sobre ecosistemas. El uso de materiales cuyos recursos no provengan de ecosistemas sensibles, es otro punto a tener en cuenta. Además, es preferible que los materiales sean autóctonos o regionales. De esta manera, se contribuye al aumento de la autosuficiencia de los sistemas y la disminución de las necesidades de transporte.
- Emisiones. Una de las razones de la preocupante reducción de la capa de ozono es, entre otras razones, por la emisión de los clorofluorocarbonos (CFC). El PVC, defensor en la causa en la industria del cloro, debido a sus emisiones de furanos y dioxinas, tan contaminantes, van siendo prohibidos en cada vez más usos, como el suministro de agua para consumo humano.
- Generación de residuos. Al concluir su vida útil, los materiales pueden causar graves problemas ambientales. El impacto será menor o mayor según su destino: reciclaje, incineración, reutilización directa, etc.
- Análisis de ciclo de vida. El Análisis de ciclo de vida (ACV) permite analizar y gestionar desde el punto de vista medioambiental los impactos asociados a un producto desde su fabricación hasta su desaparición. Identifica, clasifica y cuantifica cada uno de los impactos a partir de los recursos materiales y la energía que interviene en el ciclo completo. La vida de un material empieza en el diseño y desarrollo del producto y finaliza con las actividades de reutilización y reciclaje.
A partir de estas claves, podremos analizar con más profundidad los beneficios de optar por materiales de construcción sostenibles y las características de cada producto en particular. Nos gustaría conocer vuestras opiniones sobre este tema y si incluiríais algún factor más aparte de los que señalamos.