Sander Laudy: “En lugar de crear suelo urbano nuevo, nos limitamos a mejorar el tejido urbano existente y esto es positivo”

Publicado el 11 octubre 2017

Hace un año, estrenábamos la sección de entrevistas de nuestro blog con Sander Laudy, socio del estudio B01 Arquitectes. El pasado día 20 tuve la suerte de volver a compartir con él una Jornada Técnica sobre nuevas soluciones en construcción y rehabilitación sostenible donde él destacó la tarea pendiente de rehabilitar oficinas. Aproveché entonces la ocasión para ver, con la distancia de un año, cuáles eran sus impresiones.

 

Isabel Fernández: Sander, una de las reflexiones que nos dejabas hace un año en el blog es que “los arquitectos tenemos que afrontar nuestros proyectos de forma holística, transversal. Entonces se puede reducir a la vez impactos y costes”. ¿Se ha mejorado en este tiempo?

Sander Laudy: Sobre la consciencia de los arquitectos que un proyecto sostenible exige una aproximación transversal, pretendo poder ser ligeramente optimista. Creo que hay más conocimiento sobre los diferentes aspectos de transición energética, sobre la contaminación del medio ambiente y sobre la gestión de recursos. Y por consecuencia se sabe más sobre las posibles estrategias que están a nuestro abasto para mejorar en estos aspectos.

Creo que las certificaciones de construcción sostenible, como VERDE, LEED y BREEAM están haciendo una buena labor en este aspecto, aunque sobre todo LEED peca a veces de exclusivo y elitista. Pero lo que todos, los tres, enseñan es que hay que procurar tanto que la demanda energética de un edificio esté controlada como que se deben elegir los materiales adecuados para su construcción y pensar en la relación con el contexto urbano de cara al transporte, mezcla de usos etcétera. Vamos, que los diferentes capítulos de las certificaciones se deben afrontar todos a la vez para de verdad avanzar.

Por parte del Green Building Council España puedo decir sobre este tema que estamos orgullosos de haber actualizado nuestra página web de materiales sostenibles, materiales.gbce.es, donde queremos enseñar, mediante una ficha bien ordenada y rigurosamente sustentada, cómo los materiales en cuestión aportan en los diferentes aspectos de las certificaciones VERDE, LEED y BREEAM. Animamos a la industria de hacer ellos mismo una reflexión sobre sus propios productos, siguiendo el guión de estas fichas.

I.F. Nos comentabas que uno de los proyectos de los que te sientes más orgulloso es de El Semáforo. ¿Sigue siendo el mismo?

S.L. Ha tenido un poco de competencia, la verdad. El Semáforo ha sido mi favorito durante muchos años y por lo tanto es difícil si una obra que recién acabamos de inaugurar, como la Central de Energías Verdes de Olot, de verdad puede estar a la misma altura, pero algo hay.

Tal vez justamente por lo que comentábamos anteriormente, estamos muy contentos de esta obra porque su vocación por la sostenibilidad se expresa de tantas diferentes maneras. En primer lugar es una central de energías verdes, que ya de por si está muy bien. Pero a la vez se ha realizado dentro de un antiguo hospital, lo cual lo convierte en un ejemplo de rehabilitación muy creativo en cuanto a cambio de usos. También se ha insertado en un contexto urbano donde la comunicación con el espacio público es clave y la creación de conciencia sobre el tema de la transición energética se expresa de manera muy directa, enseñando la maquinaria y explicando las diferentes fuentes de energías renovables.

Ha sido, por lo tanto un ejercicio intelectual sobre la sostenibilidad que nos ha obligado pensar más allá de lo obvio, como fue también el caso con el Semáforo, de hecho. Así que no se aún cual será a la larga la obra más apreciada. Veremos.

I.F. En julio de 2016 acababais de firmar el proyecto Barcelona + Sostenible. ¿En qué punto se encuentra?

S.L. Estamos en este momento colaborando en un proyecto con Habitat3, Ecoserveis y en GBC España, intentando mejorar la situación energética de las viviendas de gente en riesgo de exclusión social, gestionadas por Habitat3. El plan es que las viviendas se pueden mejorar en los aspectos técnicos pero que simultáneamente habrá una cierta formación, si lo quieres llamar así, de los usuarios. Tienen que tener las herramientas para poder gestionar su vivienda de tal manera que no se gasten lo que se están gastando actualmente.

Es verdad que hay muchas viviendas deficitarias dentro del parque de vivienda social pero si estas se van mejorando en el aspecto técnico, sería estúpido no aprovechar la operación para explicar a los que viven allí como pueden mejorar el confort de manera pasiva, controlando ellos mismos los parámetros que influyen ello. Es una cuestión de combinar lo técnico con lo social, como tantas veces de hecho.

I.F. Decías también que uno de los retos para el futuro de la arquitectura sostenible era “saber renunciar al más para optar por lo mejor”. ¿Crees que se está consiguiendo?

S.L. Esto sigue siendo bastante complicado, la verdad, aunque se ha consolidado la idea que las ciudades ya no deberían crecer más. En lugar de crear suelo urbano nuevo, nos limitamos a mejorar el tejido urbano existente y esto es positivo. Pero en muchos otros aspectos aún cuesta implementar el primero y más importante de las tres R’s de la sostenibilidad, el reducir. Tal vez se nota un cierto avance en este aspecto entre los jóvenes, pero creo que aquí tenemos que esperar unos años aún parta ver de verdad un cambio de paradigma.

I.F. Ahora trabajas en la rehabilitación sostenible de oficinas. ¿Es un campo en auge?

S.L. Absolutamente. En primer lugar se ve que la gente está más concienciada que antes sobre la necesidad de un entorno laboral saludable. Tanto los jefes como los empleados se dan cuenta de lo lejos que están muchas de las oficinas de nuestro país respecto un nivel de confort y salubridad deseable.

También es una tipología donde un aumento de la eficiencia energética se traduce muy pronto en ahorros económicos, mucho antes que en las viviendas. Será también por esta razón que los promotores y propietarios de oficinas se lo están tomando en serio.

Por último, está el hecho que la tecnología de las lámparas LED ya está completamente madura, es relativamente fácil conseguir una reducción en la demanda de energía, en principio en la iluminación, pero después esta se traduce en menos calentamiento en el interior por funcionar con menos Vatios.

I.F.  Sander, para terminar, nuestra pregunta obligada: ¿cómo crees que ha evolucionado la arquitectura sostenible en el último año?

S.L. Pues sí. Aún queda mucho camino por recorrer y si quisiera podría estar aquí quejándome de muchas barbaridades que aún las hay. Pero prefiero ser positivo y decir que veo progreso y confío que habrá más.

Muchas gracias por tus reflexiones, Sander, tomamos buena nota de la web de materiales sostenibles de la GBCE, que nos parece muy interesante y confiamos en que, como dices, se esté consolidando la idea de que en lugar de crear suelo urbano nuevo, nos limitemos a mejorar el tejido urbano existente.

Categorias relacionadas: Entrevistas
  • Antonio dice:

    Muy interesante, me gusta el punto de vista de este arquitecto, que además, no conocía. Seguid así, muy buenas entrevistas!

  • Deja una respuesta

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *