Nace el Pasaporte del edificio PAS-E para mejorar la rehabilitación sostenible de los edificios
La construcción sostenible está en auge. Cada vez es mayor la preocupación por el medio ambiente y, en consecuencia, la construcción de viviendas o espacios de trabajo acordes a la idea de sostenibilidad. Pero no debemos de olvidarnos del parque edificado antiguo, que no cumple normativa alguna de sostenibilidad y que consume grandes cantidades de energía con la consiguiente emisión de enormes cantidades de carbono.
En este sentido, el PAS-E sigue las recomendaciones de la directiva europea sobre eficiencia energética en materia de rehabilitación. Se trata de un plan de acompañamiento a la comunidad y un plan de rehabilitación de edificios que marca los pasos a seguir de forma sostenible y adaptado a las necesidades de las personas.
Descarbonización del parque edificado
Según la Directiva (UE) 2018/844 relativa a la eficiencia energética, se exige la completa descarbonización del parque edificado de la Unión Europea para 2050, con lo que PAS-E nace para acelerar este proceso en nuestro país.
Se trata de un instrumento demandado por expertos del sector, tras reconocer la necesidad de instrumentos técnicos de alta calidad, útiles y fiables. Trata de dar respuesta a estas necesidades integrando el Certificado de Eficiencia Energética, el Libro del Edificio o el Informe de Evaluación del Edificio.
El objetivo de este Pasaporte del edificio es acompañar a las comunidades de vecinos en el proceso de rehabilitación, a través de las cinco fases estipuladas: diagnóstico, planificación, compromiso, ejecución y evaluación.
Esta herramienta tiene un doble papel. Por un lado, definir un programa de inversiones en el tiempo para alcanzar la eficiencia energética del edificio, considerando las aportaciones, organizando las inversiones y sus retornos energéticos y ambientales. Y, por otro lado, debe permitir la toma de conciencia de los usuarios respecto a su dependencia de los combustibles fósiles, haciendo hincapié en la necesidad de un cambio de modelo energético.
La regeneración urbana debe ser impulsada en el marco de la eficiencia energética a fin de acercarse a las metas europeas y sumarse al carro de la descarbonización, y de nosotros depende desarrollar medidas e instrumentos necesarios para acelerar la transición.
Este plan pretende adaptarse a las necesidades de cada edificio mejorando su habitabilidad en tres aspectos: la calidad técnica en los sistemas constructivos y las instalaciones, la calidad funcional de las viviendas y la eficiencia en el uso de recursos, especialmente energéticos e hídricos.
Contexto actual
En España, un 51% de las viviendas están situadas en edificios construidos antes de 1980, lo que implica un nivel de envejecimiento significativo. Un 6% se encuentra en estado deficiente o ruinoso y gran parte no se adaptan a las necesidades de la sociedad actual que, debido a su envejecimiento, necesita cada vez mayores elementos de accesibilidad en sus viviendas.
Siguiendo las tendencias actuales de consumo energético del sector de la edificación, se espera que en 2050 se llegue al límite del acuerdo de París en emisión de carbono, lo que producirá un aumento de 2ºC en la temperatura media. Lo que nos lleva a fijarnos en la necesidad de un cambio en el sistema de edificación, que reduzca la demanda energética de las viviendas y que mitigue la emisión de carbono de estas.
En base a esta necesidad nace el PAS-E, que cuenta con el apoyo de instituciones y profesionales pertenecientes al sector de la edificación, y que “busca la colaboración y el consenso entre todos los agentes para alcanzar un modelo de Pasaporte del edificio útil y eficaz que permita hacer realidad la regeneración urbana en clave de calidad de vida y sostenibilidad”, asegura Joaquín Arcas, presidente de Cíclica, la cooperativa sin ánimo de lucro que está detrás del proyecto, fundada por profesionales de la arquitectura y la investigación que tienen como objetivo contribuir al equilibrio ambiental y la equidad social.
Este pasaporte es un ejemplo más del avance y profesionalización cada vez mayor de la sostenibilidad en el sector de la construcción. Una herramienta fundamental y muy necesaria para la rehabilitación. Porque no solo la nueva construcción puede y debe ser sostenible. La gran mayoría de nuestros edificios deberán adaptarse, en algún momento, a este nuevo escenario, y herramientas como este pasaporte juegan un papel fundamental en esa transición.